Guía para conseguir la iluminación perfecta con menor impacto ambiental

La iluminación desempeña un papel fundamental en la hostelería, ya que contribuye a crear ambientes acogedores y atractivos que influyen directamente en la experiencia del cliente. Sin embargo, es crucial reconocer que la iluminación también puede tener un impacto significativo en el entorno si no se maneja de manera responsable.

Además de los beneficios ambientales, cuidar la iluminación en la hostelería también puede generar ventajas económicas y mejorar la reputación de un establecimiento. La eficiencia energética, por ejemplo, produce ahorros significativos en costes operativos a largo plazo: un proyecto lumínico que tenga en cuenta este aspecto puede llegar a reducir el gasto en la factura de la luz hasta en un 50%. Además, una iluminación adecuada puede resaltar los elementos arquitectónicos y el ambiente del lugar, atrayendo así a más clientes. No hay que olvidar que los consumidores son cada vez más conscientes de la importancia de elegir establecimientos comprometidos con la sostenibilidad ambiental, por lo que un enfoque responsable hacia la iluminación puede diferenciar a un bar o restaurante en un mercado competitivo.

Disfrutar de una buena iluminación tiene que ir de la mano de la eficiencia energética, por lo que presentamos una breve guía para conseguir la iluminación perfecta con menor impacto ambiental en su establecimiento:

Elegir tecnología LED de Alta Eficiencia Energética

Una de las formas más efectivas de reducir el impacto ambiental de la iluminación es optar por tecnología LED de alta eficiencia energética. Los LED consumen significativamente menos energía que las bombillas incandescentes y halógenas, lo que se traduce en menores emisiones de carbono. Además, los LED tienen una vida útil mucho más larga, lo que reduce la necesidad de reemplazo frecuente y la generación de residuos. Esto, además, se traduce en una gran reducción de las facturas eléctricas. Otras de sus ventajas es su control óptico: ofrecen una excelente reproducción del color, de encendido y reencendido al instante y la posibilidad de regular la intensidad de la luz. Además, no contienen mercurio. 

Utilizar sensores y sistemas de control automático

Los sensores de movimiento y los sistemas de control automático pueden ayudar a optimizar el uso de la iluminación al apagar automáticamente las luces cuando no hay nadie en la habitación o ajustar el nivel de brillo según la luz natural disponible. Según los datos del estudio El impacto de la iluminación en la hostelería de ROBLAN, empresa española experta en iluminación LED y el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), la domótica puede llegar a ahorrar hasta un 9% en la factura. Y de acuerdo con un estudio del Midwest Energy Efficiency Allance (MEEA), los sensores pueden conseguir un ahorro de entre un 30% a un 90% en diferentes zonas del espacio. Una combinación de sistemas de controles de iluminación, lámparas y luminarias energéticamente eficientes será el combo perfecto en nuestra apuesta por el planeta, optimizando el uso y los niveles de iluminación ambiental de forma que la luz solo está encendida cuando se necesita.

Optar por diseños de Iluminación Inteligentes

El diseño inteligente de la iluminación puede marcar una gran diferencia en la eficiencia energética y el impacto ambiental. Es importante considerar la distribución estratégica de las luces para minimizar los puntos oscuros y maximizar la cobertura de iluminación. Llevando a cabo una planificación precisa de las necesidades lumínicas del local, será posible aplicar o reorganizar el sistema eléctrico para usar únicamente la iluminación estrictamente necesaria, consiguiendo también una importante disminución en el consumo y en nuestras emisiones de CO2 a la atmósfera.

Aprovechar la luz natural

La luz natural es una fuente gratuita y sostenible de iluminación que puede transformar por completo un espacio. La exposición a la luz solar ha demostrado tener efectos positivos en el estado de ánimo y el bienestar de las personas, lo que puede mejorar la experiencia general del cliente y aumentar su satisfacción. Aprovechar al máximo las ventanas, claraboyas y tragaluces para permitir la entrada de luz natural durante el día se convierte en una forma económica y eficaz de generar espacios luminosos. Además, esto ayuda a reducir la dependencia de la iluminación artificial durante el día, lo que se traduce en un menor consumo de energía y costes operativos más bajos para el establecimiento. También puede ser beneficioso el empleo de cortinas o persianas para controlar la cantidad de luz que entra y, así, evitar el deslumbramiento o el sobrecalentamiento.

Implementar un plan de mantenimiento regular

Un mantenimiento regular de las instalaciones de iluminación es clave para garantizar su eficiencia y rendimiento a largo plazo. Es importante realizar inspecciones periódicas para detectar y reparar cualquier problema, limpiando regularmente las luminarias y reemplazando las bombillas defectuosas o dañadas de inmediato. Un mantenimiento adecuado no solo prolonga la vida útil de las luminarias, sino que también asegura un funcionamiento óptimo y una mayor eficiencia energética.

Además, cambiar a una fuente de energía eléctrica 100% renovable es un paso crucial hacia una eficiencia energética en iluminación óptima. No solo reducirá nuestra huella de carbono, sino que también promoverá un entorno más saludable y positivo para las generaciones futuras. Al optar por energía renovable, estamos invirtiendo en un futuro más limpio, donde la iluminación puede ser tanto eficiente como respetuosa con el medio ambiente.

En definitiva, la iluminación eficiente en hostelería no solo es una tendencia, sino una necesidad en el camino hacia un futuro más limpio. Con un enfoque proactivo hacia la iluminación sostenible, los bares, restaurantes y otros negocios del sector de la hostelería pueden demostrar su liderazgo en la protección del medio ambiente mientras ahorran costes y brindan experiencias excepcionales a sus clientes.