En un mundo cada vez más consciente de los desafíos ambientales, sociales y económicos a nivel global, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas se han convertido en una guía común para mejorar las condiciones de vida del planeta y de quienes lo habitamos. Son 17 objetivos adoptados por todos los países miembros de la ONU en 2015, y representan una llamada urgente a la acción para abordar problemas cruciales como el cambio climático, la pobreza, la desigualdad o la degradación del medio ambiente. Desde entonces, los ODS han servido como un marco integral para guiar a gobiernos, empresas y la sociedad en general hacia un futuro más próspero, equitativo y sostenible.
En el contexto del sector de la hostelería, los ODS ofrecen un marco valioso para la transformación y la mejora continua. Las empresas del sector, desde pequeños establecimientos hasta grandes restaurantes, reconocen la importancia de alinear sus acciones con los principios de sostenibilidad y responsabilidad social. Esto va más allá de reducir el impacto ambiental: también implica adoptar prácticas comerciales éticas, apoyar a las comunidades locales y promover la diversidad e inclusión. Al integrar los ODS en sus estrategias empresariales, los actores del sector de la hostelería no solo pueden contribuir al bienestar global, sino también fortalecer su posición competitiva y su reputación en un mercado cada vez más consciente y exigente. En este sentido, la hostelería tiene el potencial de crecer como motor económico mientras se consolida como agente de cambio positivo en la búsqueda de un futuro mejor.
La hostelería con la acción climática
En 2022, la hostelería representó en España cerca de un 6% del PIB nacional, con una facturación de más de 120.000 millones de euros. Además de la importancia de los bares y restaurantes como lugar de reunión y socialización, su impacto en la acción climática es directamente proporcional a su aportación a la economía. Por ello, su implicación en el desarrollo de los ODS es más que fundamental.
Cuando hablamos de acción climática nos viene a la mente el ODS 13, que hace referencia a la «Acción por el clima». Este objetivo se centra en tomar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus impactos, ya que es uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo. Este ODS es crucial para el sector de la hostelería, ya que puede tener un impacto significativo en el medio ambiente gracias a sus acciones para frenar el calentamiento global. En este contexto, las iniciativas para abordar este objetivo incluyen desde la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero mediante la adopción de prácticas sostenibles en la gestión de energía, medidas de reducción de consumo de agua o la implementación de tecnologías más eficientes y limpias.
Además, mediante la sensibilización y educación sobre el cambio climático, los establecimientos pueden informar y formar a sus empleados y clientes sobre la importancia de reducir la huella de carbono y promover prácticas ambientales responsables.
La hostelería puede marcar la diferencia con la implementación de medidas sostenibles y la promoción de la conciencia ambiental.
El compromiso con los ODS
La hostelería es cada vez más consciente de la importancia de aprovechar los recursos hídricos y energéticos, no solo por la necesidad de cuidar nuestro planeta, sino también por el ahorro que supone una buena gestión de estos recursos. Alineándose con el ODS6 (Agua Limpia y Saneamiento) y con el ODS7 (Energía Asequible y No Contaminante), es posible optar por medidas que conllevan un alto impacto en la acción por el clima y también en la factura del agua y de la luz, como la utilización de luces LED o limitadores de caudal en los grifos.
Algo parecido sucede con el reciclaje y el empleo de envases reutilizables, una tendencia de presencia creciente en la gestión hostelera que atrae a una clientela cada vez más informada y exigente al respecto. La mayor parte de establecimientos hosteleros de España reciclan: según los datos de Ecovidrio, más del 66% separa y recicla sus residuos de vidrio, y ya podemos encontrarnos con envases reutilizables en servicios como el delivery o el take away. El ahorro de energía se une a la preocupación por el consumo responsable (ODS12) y abarata los costes de los establecimientos.
Siguiendo los mismos objetivos, la confederación empresarial de Hostelería de España propone, entre otras acciones, la reducción del número de vehículos utilizados a la hora de recibir los suministros diarios. ¿Qué pasaría si, en vez de recibir cada mañana las diferentes mercancías en varias furgonetas, se organizara de manera que una única furgoneta hiciera todo el reparto? Pues que se reduciría la circulación de vehículos y por tanto la contaminación atmosférica y acústica de los territorios urbanos, contribuyendo al ODS11 (Ciudades y Comunidades Sostenibles) y a la acción climática. Además, el ahorro energético al utilizar menos transportes es significativo, y la comodidad del profesional es mayor al solamente tener que estar pendiente de un reparto.
Más del 66% de los establecimientos hosteleros separa y recicla sus residuos de vidrio.
Por otro lado, en la línea del ODS2 (Hambre Cero), muchos restaurantes, bares, cafeterías y hoteles en España llevan a cabo iniciativas que luchan contra el desperdicio y el hambre. Es el caso de Hostelería contra el hambre, una acción coordinada por Hostelería de España y Acción Contra El Hambre: desde 2010, cada año se pone en marcha para facilitar el acceso a alimentos de las personas en situación de vulnerabilidad gracias a donaciones aportadas por los propios establecimientos y por sus clientes. También existe una mayor concienciación social con respecto al desperdicio de comida: una de las aplicaciones contra el gasto innecesario más utilizadas es Too Good To Go, en la que restaurantes y hoteles pueden vender a un precio reducido paquetes de comida con fecha de caducidad cercana. Esta acción lucha contra el hambre a la vez que favorece el consumo responsable y cuida el planeta. Según el Informe de Impacto del desperdicio de Too Good To Go, solo en 2023 se evitó en todo el mundo que más de 120.000.000 de estos paquetes acabaran desperdiciados en la basura.
Además de todas estas medidas orientadas a cuidar el planeta y a la acción climática, la hostelería española también está muy comprometida en lo que a derechos sociales se refiere. Teniendo en cuenta que los establecimientos de restauración emplean a más de un millón de personas anualmente en España, su labor es muy importante a la hora de cumplir el ODS8 (Trabajo Decente y Crecimiento Económico), garantizando que el personal trabaje en buenas condiciones y que su cualificación esté siempre actualizada. El sector también tiene un compromiso con el cumplimiento ODS5 (Igualdad de Género), un reto al que contribuyen medidas como el Acuerdo Laboral Estatal de Hostelería, en el que se detallan los planes de igualdad para las empresas de este sector, o la creación de un protocolo de actuación para que el personal sepa cómo intervenir en el caso de que se produzca un episodio de acoso o agresión sexual en el establecimiento.
Al concentrar en unos pocos envíos el reparto de suministro, se reduce la contaminación urbana y se mejora la comodidad del profesional.
Los ODS como guía para la hostelería
La integración de los ODS en el sector hostelero contribuye activamente a la construcción de un futuro más próspero y justo para las generaciones futuras. Algunos establecimientos hosteleros están adoptando un enfoque proactivo hacia la sostenibilidad al alinear sus acciones con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Reconociendo su impacto en el medio ambiente y la sociedad, estos establecimientos están integrando prácticas sostenibles en su gestión diaria. Es el caso del Grupo Sibuya, quienes establecen sus acciones e iniciativas a partir de los ODS, demostrando su compromiso con el cuidado del planeta y contribuyendo de manera significativa a la promoción de acciones climáticas que mejoran el entorno y la manera de hacer las cosas.
De esta manera, podemos afirmar que la hostelería es un poderoso agente de cambio, demostrando que el compromiso con los ODS es una inversión con retorno para todos, no solo en términos de sostenibilidad ambiental y social, sino también en la promoción de prácticas responsables y en la creación de un sector más próspero y respetuoso.